Un día me encontraba viendo algunas imágenes en Internet cuando me llamó la atención una en la que se mostraban dos personas con la cara pintada de azul. (En este momento ha pasado algo muy similar, he mirado mi cara al espejo y he recordado que me tengo que quitar esta mascarilla exfoliante -azul- que tengo en el rostro, me lleva a pensar en varias cosas que ahora mismo escribo en mis notas mentales), en seguida ignoré la imagen restandole importancia. Unos días después me encontraba sentada en el comedor de mi casa y me vino la imagen a mi mente, miré a la ventana y de inmediato sentí que el recuerdo venía de ese lugar en especifico. ¿Qué significaba una ventana? No podía dejar de pensar en que detrás de mi ventana me contemplaba una persona con la cara azul. Pensé en dibujar esa fascinante idea, pero lo abandone enseguida. Las siguientes semanas volví a tener contacto con las caras azules, las veía en todos lados.
31.8.14
Sabía que para poder vivir en paz tenía que ignorar esa cascara de fruta que había olvidado tirar un tiempo atrás, quedándose en mi mochila por algunas semanas, y al encontrarla había despertado en mi el mundo lleno de arquetipos. Un inmenso mundo lleno de significados, donde la cosa más simple me hablaba de algo. Cuando entré en la cuenta ya me encontraba envuelta en esta vida extraña, llena de coincidencias, de cosas que se ligaban a otras cosas desde el momento en que nací. Una vida en la que todo podía significar cualquier cosa y viceversa. Entonces contaba cuantas gotas de agua caían del grifo hasta que cesaba el gotero, contaba los pasos que me tomaba caminar para llegar a la cocina cuando estaba de buen humor y cuantos me tomaba cuando estaba de malas. Anotaba en mi lista mental la hora en la que me levantaba por mi misma. Tenía una inmensa seguridad de que la ventana pegada a la cama hacia un sonido en punto de las 12:26 de la noche. El número 26 me siguió por un tiempo prolongado, hasta que pude percatarme de las personas a las que les atribuía ese número me pude librar de él.
Un día me encontraba viendo algunas imágenes en Internet cuando me llamó la atención una en la que se mostraban dos personas con la cara pintada de azul. (En este momento ha pasado algo muy similar, he mirado mi cara al espejo y he recordado que me tengo que quitar esta mascarilla exfoliante -azul- que tengo en el rostro, me lleva a pensar en varias cosas que ahora mismo escribo en mis notas mentales), en seguida ignoré la imagen restandole importancia. Unos días después me encontraba sentada en el comedor de mi casa y me vino la imagen a mi mente, miré a la ventana y de inmediato sentí que el recuerdo venía de ese lugar en especifico. ¿Qué significaba una ventana? No podía dejar de pensar en que detrás de mi ventana me contemplaba una persona con la cara azul. Pensé en dibujar esa fascinante idea, pero lo abandone enseguida. Las siguientes semanas volví a tener contacto con las caras azules, las veía en todos lados.
Un día me encontraba viendo algunas imágenes en Internet cuando me llamó la atención una en la que se mostraban dos personas con la cara pintada de azul. (En este momento ha pasado algo muy similar, he mirado mi cara al espejo y he recordado que me tengo que quitar esta mascarilla exfoliante -azul- que tengo en el rostro, me lleva a pensar en varias cosas que ahora mismo escribo en mis notas mentales), en seguida ignoré la imagen restandole importancia. Unos días después me encontraba sentada en el comedor de mi casa y me vino la imagen a mi mente, miré a la ventana y de inmediato sentí que el recuerdo venía de ese lugar en especifico. ¿Qué significaba una ventana? No podía dejar de pensar en que detrás de mi ventana me contemplaba una persona con la cara azul. Pensé en dibujar esa fascinante idea, pero lo abandone enseguida. Las siguientes semanas volví a tener contacto con las caras azules, las veía en todos lados.